Atlanta
Ministros de VIH/SIDA oran y buscan compasión en la Misa del Día Mundial de Lucha contra el SIDA
By NICHOLE GOLDEN, Staff writer | Published diciembre 7, 2017 | Available In English
ATLANTA—Voluntarios dedicados a servir a personas con VIH/SIDA se reunieron el 1 de diciembre en la iglesia de Our Lady of Lourdes en Atlanta para la misa “Por un mundo que vive con SIDA”.
Celebrada anualmente durante el Día Mundial de Lucha contra el SIDA, la misa se lleva a cabo alternando entre las parroquias que tienen ministerios de VIH/SIDA.
El Arzobispo Wilton D. Gregory fue el celebrante de la misa de este año, el cual es un momento para recordar y orar por una cura, por las vidas perdidas, las personas que viven con el virus, y sus familiares y aquellos encargados de su cuidado.
Más de 60 personas asistieron a la misa del viernes en la noche, organizada por el Ministerios de Justicia y Paz de la arquidiócesis.
En su homilía, el Arzobispo Gregory habló de la necesidad que tienen los discípulos de hoy de estar alerta ante los signos de los tiempos, incluyendo la reacción mundial a la pandemia del VIH/SIDA.
“Hemos vivido con esta realidad por más de una generación, y nuestras respuestas a la enfermedad y a la tristeza que esta ha dejado a su paso han sido tanto inspiradoras como ocasionalmente aterradoras”, dijo. “Gracias a Dios, ahora podemos hablar sobre el VIH/SIDA como una enfermedad que nos alcanza e impacta a todos sin discrimación”.
La creciente concientización es un signo de solidaridad que todas las personas deben experimentar a medida que la sociedad busca curas y consuela a aquellos afectados, añadió.
Sin embargo, señaló, hay un aspecto preocupante de la epidemia que no puede ser ignorado.
“Algunas personas todavía quieren enfocarse exclusivamente en el hecho de cómo se transmite el VIH/SIDA y en aquellos que pudieran haber sufrido desproporcionadamente por su presencia”, dijo el Arzobispo Gregory.
Este tipo de fanatismo, destacó, ha existido durante toda la historia de la humanidad.
“Esta noche, en nuestras oraciones y en la Eucaristía, acogemos gustosos a quienes continúan enfrentando esta enfermedad y sus repercusiones, ya sea personalmente o debido a que uno de sus seres queridos sufre o ha sucumbido a este flagelo”.
El arzobispo rezó para que “los corazones de la humanidad se suavizaran” y fueran más compasivos ante el sufrimiento.
La colcha de retazos del SIDA de la parroquia fue exhibida en el altar. Esta contiene nombres de amigos y familiares que murieron a causa del virus.
El Arzobispo Gregory dijo que el tejido sirve como un “recordatorio sacramental” de las muchas personas talentosas y vibrantes que han padecido esta enfermedad. También añadió que la Iglesia Católica, aunque no es perfecta en su respuesta a la crisis, es una cara compasiva y un signo de esperanza y concluyó con la siguiente petición: “Que comencemos un año nuevo con mucha más esperanza que temor, con más amor que odio, con más compasión que apatía y con más razones para creer en la dignidad de todos los hombres y las mujeres en lugar de pensar que son ejemplos que traicionan la dignidad común”.
Kat Doyle, directora de los Ministerios de Justicia y Paz, presentó una donación monetaria a Mercy Care en Edgewood, Atlanta, durante la misa.
“Esta donación proviene de los fondos de subvención de la segunda colecta para la Campaña Católica para el Desarrollo Humano (CCHD por sus siglas en inglés),” dijo Doyle de la contribución.
La donación ayuda al centro Edgewood a proporcionar vivienda permanente a aquellos que viven con VIH/SIDA y trasporte, a través de MARTA, para ir y regresar de sus citas.
Hazel Mitchell, quien maneja casos en Mercy Care en Edgewood, aceptó la donación y dijo que el programa cuenta con 46 residentes, principalmente hombres, lo cual refleja el rostro de la enfermedad localmente.
Mitchell mencionó que uno de sus últimos residentes, de tan solo 21 años de edad, fue diagnosticado recientemente.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés), 39.782 personas fueron diagnosticadas con el VIH en los Estados Unidos en 2016. Se estima que alrededor de 1,1 millones de personas viven con el virus, y aproximadamente uno de cada siete no lo saben.
La División de Prevención de VIH/SIDA de los CDC dijo que los estados del sur representaron más de la mitad de los nuevos diagnósticos de VIH en 2016, lo cual equivale al 38 por ciento de la población nacional.
Llamado de Simón, el ministerio de SIDA de Our Lady of Lourdes, y otras parroquias y ministerios, apoyan a los residentes de Edgewood.
Janis Griffin, líder de Llamado de Simón, ha estado involucrada con el ministerio durante 20 años. Griffin dijo que ellos proporcionan un desayuno trimestral para los residentes, quienes anteriormente no tenían un sitio donde vivir. En el desayuno navideño, estarán regalando sábanas, toallas y otros suministros.
El ministerio cuenta con 17 voluntarios, y aunque solía proporcionar comidas mensualmente, otros ministerios e iglesias comenzaron a involucrase y a compartir el trabajo.
“Es algo maravilloso”, dijo Griffin sobre la concientización y la participación.
Mitchell dijo que el apoyo social, incluyendo la comida y el bingo, significa para sus residentes el estar conectados con otros.
“Esa es una oportunidad real para interactuar”, dijo.
Llamado de Simon tiene un evento social anual donde se vende helado para recaudar fondos para los residentes de Edgewood y también mantiene la colcha de retazos memorial de SIDA de la parroquia, la cual “Es cerca de 10 pies cuadrados y tiene 100 nombres… lo cual es demasiado”, dijo Griffin.