ATLANTA—El Arzobispo Gregory J. Hartmayer, OFM Conv., y los obispos auxiliares de Atlanta se unieron a otros líderes interreligiosos para pedir a los legisladores de Georgia que cambien el estándar de prueba para las personas con discapacidad intelectual en casos capitales.

Georgianos por Alternativas a la Pena de Muerte (GFADP por sus siglas en inglés) y la Coalición de Líderes Religiosos de Color (FLOCC por sus siglas en inglés) organizaron un servicio de oración al mediodía en las escaleras del Capitolio estatal el 10 de octubre con motivo del Día Mundial contra la Pena de Muerte. El evento contó con comentarios y oraciones de líderes religiosos del estado, incluyendo el Arzobispo Hartmayer.

El arzobispo y los obispos, junto con otros líderes religiosos, firmaron la carta pidiendo a los legisladores que aborden el tema en la sesión legislativa de 2024. La carta se encuentra a continuación:

“10 de octubre de 2023

XXI Día mundial anual contra la pena de muerte

Dirigido a la: Asamblea General de Georgia

Nosotros, como líderes religiosos de todos los rincones del estado de Georgia, nos hemos unido para llamar su atención sobre una injusticia que está ocurriendo en nuestro estado e instarlos a tomar medidas para detenerla.

En 2002, la Corte Suprema de los Estados Unidos dictaminó que ejecutar a aquellas personas con discapacidades intelectuales era una violación a la protección contra castigos crueles e inusuales de las enmiendas Octava y Decimocuarta. El tribunal dejó en manos de cada estado el desarrollo de estándares para determinar la discapacidad intelectual. Lamentablemente, Georgia es el único estado que exige el más alto nivel de prueba, más allá de toda duda razonable. Como resultado, personas con discapacidades intelectuales han sido ejecutadas y el riesgo de que continúen siéndolo persiste.

Aunque nuestros textos sagrados y tradiciones difieren, todas nuestras tradiciones religiosas nos llaman a proteger la dignidad de las personas, especialmente las más vulnerables entre nosotros. No podemos quedarnos de brazos cruzados mientras nuestras leyes estatales, aunque diseñadas para proteger a personas con discapacidades intelectuales, garantizan que ellas no tengan ninguna posibilidad de demostrar su discapacidad en un tribunal de justicia. Por lo tanto, los instamos a que apoyen una legislación que cambie este estándar de prueba de “más allá de toda duda razonable” a “preponderancia de la evidencia”. Solo mediante este cambio en el estándar de prueba podremos evitar que ocurra la ejecución injusta de una persona con discapacidad intelectual.

Este asunto se ha presentado anteriormente ante nuestra legislatura estatal muchas veces. Esperamos que este sea el año en el que digamos no más a esta injusticia y aprobemos una legislación que proteja los derechos constitucionales de las personas con discapacidades intelectuales.

Juntos, representamos a millones de fieles de Georgia que están unidos por un compromiso común de proteger la vida y la dignidad humanas. Les pedimos que respeten los valores del pueblo de fe de Georgia y la ley suprema de la tierra, y que tomen medidas para evitar que se produzcan más ejecuciones de nuestras personas más vulnerables.

Unidos en la fe y la justicia,” 

Reverendísimo Gregory J. Hartmayer, OFM Conv., Arzobispo de Atlanta 

Reverendísimo Joel M. Konzen, S.M., Reverendísimo Bernard E. Shlesinger III y Reverendísimo John N. Tran, obispos auxiliares de Atlanta