Georgia Bulletin

The Newspaper of the Catholic Archdiocese of Atlanta

Photo Courtesy of Catholic Extension
Pastors and lay ministers visit the fields in Diocese of Yakima, Washington to meet and observe workers as they pick cherries and inspect the fruit.

Atlanta

Sacerdotes de Atlanta se unen a viaje de Catholic Extension para visitar trabajadores migrantes

By SAMANTHA SMITH | Published septiembre 22, 2021  | Available In English

ATLANTA—En el mensaje de este año para la Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado, el Papa Francisco explicó que los católicos están llamados a hacer que la Iglesia sea más inclusiva.

“En el encuentro con la diversidad de los extranjeros, de los migrantes, de los refugiados y en el diálogo intercultural que puede surgir, se nos da la oportunidad de crecer como Iglesia, de enriquecernos mutuamente”, dijo el papa.

“Hoy la Iglesia está llamada a salir a las calles … curar a quien está herido y buscar a quien está perdido, sin prejuicios o miedos,” añadió el Santo Padre.

Siete sacerdotes de varias diócesis se unieron a Catholic Extension para participar en un programa de inmersión misionera del 27 al 29 de julio, el cual consistió en un viaje a la Diócesis de Yakima en el estado de Washington para visitar a trabajadores migrantes.

Mons. Jim Schillinger, coordinador de Formación Continua de Sacerdotes y el Padre Gaurav Shroff, párroco de la Iglesia de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro en Carrollton, ambos de la Arquidiócesis de Atlanta, se unieron al viaje.

Desde su fundación en 1905, Catholic Extension ha proporcionado fondos y recursos a las diócesis de los Estados Unidos y de otros países. La organización apoya a las comunidades católicas pobres y, a menudo aisladas, a través de diversos medios, como la construcción y reparación de sus instalaciones, ofreciendo educación para religiosos y religiosas y ayudando a los ministerios universitarios y de extensión.

En 2018, Catholic Extension lanzó el programa de inmersión misionera para párrocos, el cual permite que ellos experimenten la Iglesia en áreas pobres del país. Esta oportunidad permite que los clérigos de comunidades pobres compartan sus historias y recuerda a los sacerdotes visitantes que la Iglesia va más allá de sus propias parroquias.

“Lo que nos encanta hacer es simplemente poder llevar a las personas a lugares donde la Iglesia está viva, donde se está viviendo la misión de maneras muy únicas y muy poderosas”, dijo Joe Boland, vicepresidente de misión de Catholic Extension.

En su papel, Boland “puede ver de primera mano algunas de las mejores cosas que suceden en la Iglesia Católica”, dijo. “Y es una verdadera alegría para nosotros poder compartir eso con los demás”.

Acercando a otros a la Iglesia

La Diócesis de Yakima es el hogar de una población cada vez mayor de trabajadores migrantes. Los migrantes temporales llegan al Valle de Yakima en junio para la temporada de recolección de cerezas. Después de la temporada, algunos regresan a otras partes de los EE. UU. y otros se quedan a recoger manzanas o peras. Su trabajo es de mano de obra intensiva, y los días comienzan a las 4 a. m.

Durante la cosecha, la mayoría de los migrantes se quedan en campamentos temporales establecidos para albergar a individuos y familias. Estos campamentos están aislados de las comunidades circundantes.

Debido a que los trabajadores tienen horarios exigentes y carecen de transporte para ir a la iglesia, el Obispo Joseph Tyson de la Diócesis de Yakima inició un ministerio para llevar la fe a los trabajadores. La misa se lleva a cabo los miércoles por la noche en los campamentos.

Durante el viaje de inmersión, los viajeros se reunieron con el Obispo Tyson, algunos seminaristas y otras personas de la Diócesis de Yakima, para pasar tiempo y celebrar la misa con los trabajadores migrantes. Adicionalmente, ayudaron con el programa Literacy Wagon el último día.

“Estar expuesto a ese mundo y ver la increíble organización y coordinación que estaba sucediendo fue muy impresionante y muy inspirador”, dijo Mons. Schillinger.

Visitar la diócesis y estar con trabajadores migrantes fue una experiencia muy diferente para Mons. Schillinger, quien ha sido sacerdote durante casi 40 años, de los cuales una gran parte ha servido en el área administrativa. Para él, la visita a la Diócesis de Yakima fue “refrescante”.

“Esto es lo que Cristo quiere que hagamos, para esto que nos convertimos en sacerdote, para trabajar con la gente, para servirle”, dijo Mons. Schillinger.

El Padre Shroff celebró la misa con los trabajadores migrantes y presenció cómo tres de ellos recibían su primera Comunión y confirmación.

“Fue hermoso verlo”, dijo el párroco. “Lo que más me llamo la atención fue el deseo que muchos de ellos tienen de permanecer cerca de Dios y de la Iglesia, y de crecer realmente en su fe”.

El párroco disfrutó viendo cómo el ministerio va más allá de la parroquia. Gran parte de lo que hacemos como Iglesia es tratar con las personas que vienen a nosotros, dijo.

“Ellos en realidad, están saliendo y buscando formas creativas de servir a esta población de trabajadores”, añadió.

El Padre Shroff fue inspirado para replantear cómo las parroquias forman discípulos misioneros.

Mons. Schillinger planea alentar a los párrocos locales a asistir a futuros viajes misioneros de inmersión organizados por Catholic Extension.

Es bueno que los seminaristas y los sacerdotes disfruten y aprendan de la experiencia, indicó.

Para el Padre Shroff, esta experiencia confirmó que “la Iglesia está viva”. Cuando la Iglesia acepta quién es realmente, trae la Buena Nueva y la vida divina a la gente, expresó.

Para obtener más información sobre la labor de Catholic Extension, visite catholicextension.org.