Atlanta
Arzobispo Hartmayer emite declaración tras protestas y violencia racial
Published mayo 30, 2020 | Available In English
ATLANTA–El Arzobispo Gregory J. Hartmayer, OFM Conv., Arzobispo de Atlanta, publicó la siguiente declaración el 29 de mayo a raíz de varios incidentes de violencia racial y protestas:
“El pecado del racismo continúa persiguiendo a los Estados Unidos. En el último mes, hemos visto morir a dos hombres negros, uno de ellos mientras rogaba por su vida. Esta mañana nos despertamos para enfrentar el torrente de dolor y rabia de las últimas manifestaciones de racismo en los Estados Unidos. En Atlanta, el lugar de nacimiento del Dr. Martin Luther King Jr., esa ira hirvió anoche convirtiéndose en violencia y destrucción.
Ayer, la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos emitió una declaración en respuesta al asesinato de George Floyd en Minneapolis. Hace solo unas semanas, aquí en Georgia, otro hombre negro, Ahmaud Arbery, fue asesinado sin sentido. Me uno a mis hermanos obispos condenando el racismo en todas sus formas. Me uno a ellos para hacer un llamado a todos los que ocupan puestos de autoridad, policía, funcionarios electos y sí, incluso pastores, para combatir este problema, para buscar el diálogo que necesitamos para llevar a cabo la ardua labor de encontrar la verdadera justicia en nuestro mundo.
Repito lo que dijo anoche la Dra. Bernice King, hija del Dr. Martin Luther King Jr.: ‘Este es un momento en el que todos tenemos que escuchar, tenemos que escuchar los gritos que provienen de los corazones y las almas de mis jóvenes hermanos y hermanas, y de todos los demás que están en las calles de los Estados Unidos en este momento y en nuestra ciudad’.
La Dra. Bernice King pidió una solución pacífica a este mal. ‘Nunca alcanzaremos la justicia, la equidad y la verdadera paz, la cual no es simplemente la ausencia de tensión sino la presencia de justicia, a menos de que lo hagamos por medios pacíficos’.
Los asesinatos sin sentido serán cada vez más normales en nuestra sociedad hasta que nos veamos los unos a los otros como un reflejo de nuestro Creador y reconozcamos el precioso regalo de la vida humana desde el momento de la concepción. Dios nunca ha creado un error. Lo que le hacemos a nuestra vida o a la vida de otra persona está arraigado a nuestro libre albedrío y a una manifestación de amor o maldad presente en nuestro mundo. Nuestro poder de libre elección tiene consecuencias.
Hago un llamado a nuestra comunidad católica en Georgia a que nos unamos este fin de semana de Pentecostés y a continuar haciéndolo. Busquemos la verdadera justicia. Encontremos a nuestro prójimo en el amor y unámonos para orar y trabajar para erradicar el racismo. En las palabras del Papa San Pablo VI: ‘Si queremos paz, debemos trabajar por la justicia’”.