La carta papal de hace un año es de suma importancia
By ARCHBISHOP WILTON D. GREGORY, Comentario | Published junio 22, 2016 | Available In English
Ocasionalmente tenemos la fortuna de encontrar a una persona que ha conservado cuidadosamente un número importante y significativo de cartas personales. Con frecuencia, las parejas casadas, durante un aniversario especial o a causa de la muerte de uno de los cónyuges, abren el tesoro de sus corazones y comparten cartas que se intercambiaron al comienzo de su relación. Estas cartas revelan la relación prometedora y amorosa entre dos personas y siempre son conmovedoras, a veces muy cómicas y quizá incluso indican cómo una historia de amor tuvo sus momentos difíciles pero logró superarlos. Las cartas pueden ser una parte importante de nuestras historias personales.
Las cartas papales también son fuentes vitales de nuestra historia como Iglesia. De hecho, algunas de ellas son momentos decisivos en la vida de toda la Iglesia. Creo que el Papa Francisco ha escrito tan importante carta en “Laudato Si'”, cuyo primer aniversario conmemoramos recientemente el 24 de mayo. “Laudato Si’” es significativa ya que le pide a toda la humanidad que reflexione y tome las medidas adecuadas para abordar un asunto que afecta nuestras vidas—la acelerada destrucción del medio ambiente que compartimos. El Santo Padre se apoya en su tocayo, San Francisco de Asís, para exhortarnos a cuidar el planeta que todos nosotros debemos llamar nuestra casa común.
En la Arquidiócesis de Atlanta, tuvimos la fortuna de haber tenido la experta y generosa asistencia de la Oficina de Ciencias Ambientales de la Universidad de Georgia para ayudarnos a desarrollar y respaldar un plan de respuesta a la carta del Santo Padre. Esa asistencia fue hecha posible a través del generoso y proactivo interés de la directora Susan Varlamoff, quien tomó la iniciativa de trabajar con la Arquidiócesis de Atlanta, incluso antes de que la carta papal fuera publicada.
Nuestra respuesta a “Laudato Si'” ha capturado el interés de la comunidad ecuménica aquí en Atlanta. Tanto el Reverendo Dr. Raphael G. Warnock, de Ebenezer Baptist Church como el Reverendo Dr. Gerald Durley, miembro del consejo de National Interfaith Power and Light, han respaldado firmemente el plan de respuesta de la Arquidiócesis de Atlanta. Ambos pastores ven que esta carta no pertenece exclusivamente a la Iglesia Católica, sino que es una carta escrita a todas las personas de buena voluntad y de todo tipo de fe; y a quienes no profesan ninguna creencia religiosa en particular. Es una carta escrita a todas las personas del planeta que compartimos. El pontífice católico la escribió, pero se la dirigió a todo el mundo.
Como otras cartas históricamente significativas, esta nos dice mucho sobre nuestro pasado y nuestro futuro. La carta del Papa Francisco detalla las consecuencias de la explotación de nuestro planeta—especialmente aquellas que afectan las vidas de los pobres, que con mucha frecuencia no tienen voz para controlar las acciones de los poderosos y los ricos al determinar cómo los recursos de este mundo son utilizados y compartidos.
Como otros documentos de valor, “Laudato Si'” delinea cómo el presente se ha visto afectado por el pasado. El mundo que habitamos comenzó como una realidad prístina, repetidamente descrita en el libro de Génesis como muy bueno —y de hecho así fue creado. Y todos fuimos encargados de cuidarlo y preservarlo para las generaciones futuras. La carta del Papa Francisco nos recuerda que todavía hay mucho trabajo por hacer.