Vitalidad de nuestra comunidad reflejada en el rito anual
By ARCHBISHOP WILTON D. GREGORY, Comentario | Published febrero 19, 2016 | Available In English
Pat DeJarnett, de nuestra Oficina arquidiocesana para el Culto Divino, maneja cuidadosamente muchas de las estadísticas para nuestros ritos, así que yo sabía que sus proyecciones en referencia a esta ceremonia en particular serían precisas. El otro día ella me dijo que el número total de nuestros candidatos y catecúmenos probablemente rompería récord para nuestra ceremonia arquidiocesana del Rito de Elección de este año, añadiendo que todavía había un par de parroquias que tenían que enviar sus cifras. Ella solo sonrió, y debo admitir que yo también lo hice. Que maravilloso inicio para nosotros recorrer, ya que sugiere que el Señor continúa bendiciendo la obra de evangelización en esta Iglesia local.
Le indiqué a Pat que simplemente podríamos estar experimentando la gracia de lo que muchos llaman el “efecto Francisco” ya que recientemente las personas han encontrado en nuestra Iglesia una comunidad muy acogedora.
Con toda honestidad, tendría que además ser el primero en admitir que también hemos sufrido la pérdida de muchos católicos durante el año pasado que pudieron haberse retirado de la práctica de nuestra fe por una variedad de razones diferentes. Ellos nunca deben ser olvidados en nuestras oraciones y afecto. Por lo tanto, nuestra labor no debe ser simplemente un juego de números, sino una obra del Espíritu. El Papa Francisco ha generado mucha curiosidad positiva en la Iglesia Católica, que sirve para animar a la gente a volver a la práctica de nuestra fe o para explorar la posibilidad de formar parte de nuestra familia religiosa. A pesar de la energía muy positiva de este pontificado, la obra de evangelización sigue siendo una tarea local — un esfuerzo personal de todos nosotros. Tener a un papa afectuoso y extrovertido no sustituye a una comunidad acogedora y cálida. El Papa Francisco puede atraer a las masas que lo conocen personalmente o ven en los medios de comunicación, pero solo amando a los católicos locales, la popularidad del Pontífice puede convertirse en una invitación personal a la fe. En ese sentido, agradezco a todos ustedes que han dado a nuestra Iglesia una imagen tan positiva en nuestras parroquias, escuelas e instituciones. Su buen ejemplo, su bondad cálida, su testimonio gozoso de fe y su invitación abierta han dado sus frutos trayendo personas a la Iglesia en el norte y centro de Georgia.
El Rito de Elección en la Arquidiócesis de Atlanta continúa reflejando la vitalidad radiante de nuestra comunidad multicultural. En el rito de este año, dimos la bienvenida a algunas personas usando su vestimenta nativa, hablando idiomas distintos al inglés, acompañados por miembros de la familia que ya son católicos — incluso le dimos la bienvenida a familias enteras. Cada parroquia presentó con gran placer a sus candidatos y catecúmenos como signos de vitalidad de la parroquia. Las parroquias presentaron sus registros escritos de las actividades del Rito de Iniciación Cristiana de Adultos (RCIA por sus silgas en inglés) como una indicación de que el Rito de Elección es una celebración anual de la energía sacramental de su comunidad. Besé cada libro como lo hago con el libro de los Evangelios durante la misa ya que esos registros son claramente buenas noticias en verdad.
Nuestros candidatos y elegidos volverán a sus comunidades y continuarán su preparación para los sacramentos de la Pascua, y serán las luces vivas que iluminen a esas comunidades durante la Cuaresma. Trate de sacar tiempo para conocer a algunas de estas buenas personas que se han unido a nuestra comunidad y personalmente anímelos durante estas próximas semanas. Ellos representan el futuro de nuestra Iglesia local, la cual continúa brillando maravillosamente a lo largo de estos 69 condados de Georgia — ¡gracias a Dios!