Georgia Bulletin

The Newspaper of the Catholic Archdiocese of Atlanta

PHOTO BY ANDREW NELSON
(L-r) Celia Browning and Nathan Haydel lead students at Our Lady of Mercy High School, Fayetteville, in honoring the 17 victims of the shooting at a Parkland, Florida high school. Many Catholic school students joined with prayers and calls for action during the March 14 national protest against gun violence. Middle and grade school students participated by committing acts of kindness and writing letters to the Marjory Stoneman Douglas High School community.

Fayetteville

Estudiantes católicos conmemoran tragedia de Parkland con oraciones y activismo

By ANDREW NELSON, Staff writer | Published marzo 22, 2018  | Available In English

FAYETTEVILLE—Al igual que sus compañeros alrededor del país, los estudiantes de las escuelas católicas de la Arquidiócesis de Atlanta honraron a las 17 víctimas del tiroteo de la escuela secundaria en Parkland, Florida.

During the National School Walkout on March 14, (clockwise, from foreground center) senior Paul Plaia and juniors Danait Tesfai and Charlie Whitehead were three of the students at Marist School, Atlanta, who held posters displaying the 17 victims of the Stoneman Douglas High School shooting in Parkland, Fla., one month earlier. Plaia is holding 17-year-old Joaquin Oliver, while Whitehead holds 15-year-old Luke Hoyer. Photo By Michael Alexander

“(Los estudiantes) hemos decidido que este es un problema. Esto es para que los adultos dirijan su atención hacia esta cuestión, especialmente los políticos y legisladores”, dijo Celia Browning, estudiante de penúltimo año y una de las organizadoras de un evento que tuvo lugar el miércoles, 14 de marzo en la escuela secundaria de Our Lady of the Assumption en Fayetteville.
El día marcó un mes desde que un joven utilizó un rifle AR-15 para matar estudiantes y personal en la escuela secundaria Marjory Stoneman Douglas. Los fiscales buscarán la pena de muerte para el pistolero acusado, Nikolas Cruz de 19 años de edad.
Como recordatorio de la tensa situación en las escuelas, un simulacro impidiendo el ingreso a la escuela con la policía del Condado de Fayette en Our Lady of the Assumption ocurrió coincidentemente la víspera de las protestas en todo el país.
Durante el ejercicio, los estudiantes de Our Lady of the Assumption se agacharon en sus aulas oscuras. Los maestros cubrieron las ventanas de cristal en las puertas de los salones de clases. El Hermano Colton Rodgers, capellán y maestro de la escuela, colgó su hábito religioso gris de repuesto para evitar la vista al interior.
“Había un silencio profundo”, dijo el Hermano Rodgers, miembro de la Orden de los Frailes Menores Conventuales. “Escuché esa quietud”.
Él imaginó esa misma quietud en la escuela secundaria de la Florida, pero quebrantada por los disparos.
En los servicios que se llevaron a cabo en las escuelas católicas de la arquidiócesis, los líderes educativos mezclaron el activismo de los estudiantes con la tradición católica.
En la Escuela Marista, cientos de estudiantes se reunieron en la Plaza de los Alumnos para orar en silencio mientras 14 estudiantes sostenían carteles de los 14 estudiantes víctimas del tiroteo, y tres miembros del personal sostenían las tres fotos del personal asesinado.
Eliza Griffin, una joven marista que cursa penúltimo año, vio a estudiantes y adultos con los ojos llorosos en el memorial.
“Queríamos que la gente viera que estos estudiantes asesinados son muy similares a todos nosotros, queríamos crear empatía, y eso es exactamente lo que terminamos haciendo”, dijo Griffin en un correo electrónico.
En la escuela secundaria jesuita Cristo Rey Atlanta, los estudiantes protestaron la violencia armada agitando carteles desde la acera fuera de su centro escolar. El

Some of the estimated two to three hundred students gather at Marist School’s Alumni Plaza, March 14, as part of the National School Walkout. For 17 minutes, students and faculty members participated in a silent protest against gun violence at schools across the country and to remember the 17 victims, shot and killed, at Stoneman Douglas High School in Parkland, Fla., one month earlier. Photo By Michael Alexander

Diácono Bill Garrett, presidente de Cristo Rey, fue el único líder de una escuela católica en firmar una carta de un grupo de colegios independientes de Georgia que pide una legislación de control de armas con “sentido común”.
Otras escuelas secundarias dedicaron misas, separaron tiempo para orar por las vidas de las víctimas asesinadas y pidieron escuelas más seguras.17 fotos grandes de las víctimas asesinadas en la Florida fueron exhibidas en el auditorio oscuro lleno de estudiantes de la escuela secundaria Our Lady of Mercy.
En la gran pantalla, una chica llevaba un vestido brillante, como si se estuviera preparando para la fiesta de graduación. Otra sonreía mientras disfrutaba de un helado.
En el programa de la mañana del 14 de marzo, los casi 300 estudiantes de OLM oraron por las vidas que fueron interrumpidas prontamente. El nombre de cada víctima se leyó en voz alta y se encendió una vela. En el auditorio, se dijeron plegarias por los consejeros que tratan a las personas con enfermedades mentales y por aquellos con “malicia hacia los demás”.
Nathan Haydel, un estudiante de 9º grado, dijo que los rostros jóvenes de las víctimas expresan que no habían tenido la oportunidad de vivir sus sueños.
“Necesitamos hacer ruido. Esos podríamos haber sido nosotros”, dijo Haydel.
El Hermano Rodgers le recordó a los estudiantes que como cristianos bautizados están llamados a vivir como “sacerdotes, profetas y reyes” y los felicitó por levantar su voz profética durante el debate nacional que rodea las armas. El capellán dijo que se unen a los santos y otros en la búsqueda de un “cambio generalizado a través de protestas pacíficas y métodos contraculturales”.
Este asunto de violencia armada en las escuelas construye nuevos líderes estudiantiles.
Browning, de 17 años, es una porrista. Haydel, de 15, está trabajando en su rol como protagonista en el musical de primavera de la escuela, “La Cenicienta”. Browning pertenece a la iglesia de St. Philip Benizi, en Jonesboro y Haydel asiste a la iglesia de Our Lady of Lourdes, en Atlanta. La marista Griffin, de 17 años, es editora de Blue & Gold, el periódico escolar, y una de las participantes del programa de drama y las causas de la justicia social. Ella asiste a la iglesia de Buckhead.

Marist School junior Eliza Griffin was one of a group of students, who approached the administration, with the idea of how Marist could honor the Stoneman Douglas High School shooting victims and participate in the National School Walkout. During a silent protest at the school’s Alumni Plaza, Griffin held a poster with a picture of 14-year-old victim, Gina Rose Montalto. Photo By Michael Alexander

“Ellos tenían mi edad. Habían experimentado algunas de las mismas cosas que yo he experimentado en la vida, la escuela, los deportes”, dijo Browning de las víctimas.
Añadió que se sentía vigorizada al participar en la campaña nacional para demostrar su apoyo a los sobrevivientes de la Florida.
“Cuando me enteré de lo que sucedido en la Florida me sentí devastada”, dijo Browning.
Haydel ha estado pensando en los sueños trucados de esos jóvenes. Él tiene sueños futuros, al igual que los tenían los estudiantes de la Florida, pero sus sueños fueron trucados por la violencia en su escuela, dijo.
“Nadie se lo merece. Ellos no habían hecho nada”, comentó.
El director de Mercy, Bill Dooley dijo que los estudiantes se acercaron a él para preguntarle cómo demostrar solidaridad hacia sus compañeros. Ellos demostraron pasión por su objetivo y al mismo respeto por la comunidad escolar, dijo.
“Los estudiantes están intentando encontrar su voz”, dijo Dooley.
Los estudiantes en las escuelas primarias e intermedias también apoyaron la causa. En la escuela Queen of Angels, en Roswell, los estudiantes tomaron tiempo para hablar con alguien que no conocían bien. En Immaculate Heart of Mary, en Atlanta, los estudiantes honraron a las víctimas completando 17 actos de bondad. En la escuela intermedia de St. Thomas More, en Decatur, ellos reflexionaron en silencio y llevaron a cabo un servicio de oración de 17 minutos.
El programa de la mañana en la escuela secundaria de Fayetteville no es el final. Los estudiantes organizadores dijeron que su objetivo es mantener el tema frente a la comunidad y que los estudiantes mayores, con edad suficiente para votar, hagan responsables a los líderes políticos.
“Los políticos me van a escuchar antes de votar o después de que ejerza mi derecho al voto”, dijo Browning, quien votará por primera vez en noviembre. Poco después de los tiroteos, los estudiantes escribieron cartas a los legisladores estatales instándolos a actuar para controlar las armas. Los viernes, los estudiantes y el personal se reunirán junto al asta de la bandera para orar y demostrar su solidaridad. Esto continuará hasta el final del año escolar. Actualmente se están discutiendo planes para la conmemoración del tiroteo de 1999 en Columbine, Colorado, en abril.