Georgia Bulletin

The Newspaper of the Catholic Archdiocese of Atlanta

Lo Que He Visto Y He Oído (9 Septiembre 2009)

Published septiembre 9, 2009  | Available In English

A mi llegada a Belleville ya habían pasado siete años de la celebración del centenario de la fundación de esa diócesis. Estas dos Iglesias regionales están bien establecidas, y por los aniversarios que celebran se supone que ya no queda nadie que pudiese recordar sus verdaderos comienzos.

Hace tres años atrás la Arquidiócesis de Atlanta celebró los 50 años de la fundación de la diócesis, y varias personas me comentaron sobre esas épocas pioneras de nuestra breve historia. Cincuenta años es un periodo bastante largo de tiempo que merece celebrarse, pero no es lo suficientemente largo como para que no haya personas que recuerden la fundación misma de una diócesis o parroquia. En realidad, el domingo pasado la Parroquia San Peter and Paul en Decatur celebró sus 50 años, y entre la concurrencia había personas que habían sido miembros fundadores de esa comunidad de fe. Durante la ceremonia muchos de ellos recibieron tributos florales que presentaron miembros actuales de la parroquia como una expresión de agradecimiento y estima por sus primeros esfuerzos.

El domingo celebré el 25 aniversario de la fundación de la Parroquia Christ Our Hope, y muchos feligreses fundadores, incluso algunos de los primeros párrocos, asistieron a este feliz acontecimiento. Durante la lectura pública de la historia de la parroquia, se mencionaron algunas personas a quienes se les agradeció y reconoció en forma especial. Se dedicó una placa de mármol en honor del párroco fundador, Padre John Kieran, y en ese momento todos aprovecharon la oportunidad de agradecer a los que habían participado en el pasado. Nuestra diócesis es todavía bastante joven, y debido a los pocos años de existencia de muchas de nuestras instituciones, sus miembros fundadores pueden ser homenajeados en aniversarios especiales y recibir el agradecimiento de los miembros actuales de la comunidad. Una comunidad de un siglo, o siglo y medio, no puede ofrecer esto.

El sábado por la tardecita fui a visitar la Escuela St. Pius X High que celebraba la misa y el banquete anual en honor de sus donantes. Durante la recepción, se me acercó una señora encantadora y me invitó personalmente a la fiesta de los 50 años de su promoción de St. Pius X que se celebrará en octubre. Era claro que la señora tenía muchas ganas de ver a sus compañeros de la promoción 1959 de St. Pius y revivir muchos de los momentos felices de sus años de escuela secundaria. La celebración de los aniversarios es muy importante porque nos permite agradecer las riquezas del pasado y revivir los recuerdos de nuestra juventud.

Justo cuando salía de la recepción, una pareja me alcanzó y me dijo que estaba celebrando sus 28 años de casados y pidieron mi bendición. No se habían dado cuenta de que ellos eran una bendición para mí, y di gracias por su vida matrimonial que había sido bendecida con hijas mellizas y muchas más bendiciones de las que ellos pudiesen recordar. Siempre es importante dar gracias por el pasado porque nos prepara mucho mejor para enfrentar el futuro que Dios nos tiene reservado para todos.